Conéctate con nosotros

Entretenimiento

Jamming: un año de la mayor decepción en la historia reciente de los conciertos en Colombia

Del 19 al 21 de marzo de 2022 se había anunciado en Colombia el Jamming Festival, un evento con una alineación envidiable y variopinta de artistas. Black Eyed Peas, Sean Paul, Shaggy, Los Tigres del Norte, Orishas, Damian Marley, Don Omar, Zion y Lennox, Caifanes, El gran combo de Puerto Rico, Molotov, Los Auténticos Decadentes…

Publicado

en

Jamming: un año de la mayor decepción en la historia reciente de los conciertos en Colombia

Del 19 al 21 de marzo de 2022 se había anunciado en Colombia el Jamming Festival, un evento con una alineación envidiable y variopinta de artistas. Black Eyed Peas, Sean Paul, Shaggy, Los Tigres del Norte, Orishas, Damian Marley, Don Omar, Zion y Lennox, Caifanes, El gran combo de Puerto Rico, Molotov, Los Auténticos Decadentes y muchos otros más aparecían en un cartel ambicioso en tiempo y géneros musicales.

El Jamming iba a celebrar su décimo aniversario. Ya lo conocíamos como un festival de nicho, enfocado en los ritmos afrocaribeños y al que asistían, por lo general, unas 10.000 personas. Pero esta fiesta pintaba como algo que nunca antes habíamos vivido.

El cartel parecía demasiado bueno para ser verdad, y efectivamente, el Jamming 2022 nunca se realizó. Quienes adquirieron su boleta para un puente lleno de música en Playa Hawai, a las afueras de Ibagué, casi un año después, esperan la devolución del dinero de sus entradas. Esto sin mencionar lo que perdieron en estadía y transporte desde sus ciudades.

***

“Estaba levantándome, menos mal aún en Bogotá. Íbamos a viajar ese viernes en la noche. Eran como las 6:20 de la mañana y recibí un mensaje por WhatsApp de un amigo en el que me decía que pusiera CityTv, que estaban anunciando que se cancelaba el Jamming . Le dije que no me creía la broma, pero sintonicé el canal y nos dimos cuenta de que sí, lo habían cancelado».

«Llegué a la oficina y me enteré que no se realizaría el Jamming.. Resulta que un primo de Bogotá me había escrito desde la madrugada para contarme que habían cancelado el evento. Sin embargo, en Leticia la señal de celular e Internet suele caerse y fallar con mucha frecuencia, así que hasta que llegué a la oficina y me conecté al wifi, fue que pude recibir los mensajes y luego ver las noticias y tuits de toooodo el mundo”.

Historias como estas nos cuentan algunos de los que compraron la boleta para el Jamming. Aunque el festival nunca había tenido tal alcance mediático, en 2022 salió en casi todos los medios la noticia de su cancelación.

Jamming 2022.jpg

El anunciado cartel del Jamming 2022.

En ese momento se estimaron pérdidas superiores a los 30.000 millones de pesos y una parte de ellas fue por parte de los emprendedores que iban a vender sus productos en el festival.

“Yo estaba comprometida a hacer 1600 tamales”, nos cuenta Blanca, una de las microempresarias invitadas. “Cuando se canceló eso, yo ya tenía todo comprado porque eran 3 días. Eso fue un caos, me llené de estrés, casi me enloquezco porque uno en lo poquito que tiene, el sacrificio que hace y perderlo todo es muy duro”.

“Yo alcancé a perder más de 3 millones, porque eso era lo que yo había invertido y lo que pude recuperar fue muy poco”, agrega.

“Fue un shock total”, nos cuenta Gisele, otra emprendedora que planeó participar en el festival, sobre el momento en el que se enteró de que el evento iba a ser cancelado. El día que ya teníamos que montar nuestro stand empecé a ver que no estaban dejando entrar. Estaban saliendo personas. Obviamente fue una sensación de mariposas en el estómago, pero no de forma positiva”.

Gracias a las redes sociales y a la solidaridad de miles de personas con los emprendedores de Ibagué, Gisele pudo recuperar buena parte de lo invertido. Lo mismo le sucedió a Santiago, quien tenía un emprendimiento de brownies. “Al final no tuvimos pérdidas, porque logramos vender más de 700 brownies que teníamos previstos».

Si bien muchos se sorprendieron ante la cancelación, lo cierto es que días antes algunos aspectos del festival generaron sospecha.

Festival Jamming en su edición 2018.

Fotos: Brayan Garnica

***

¿Un fracaso anunciado?

Varias personas en Twitter notaron que algunos de los artistas anunciados no mencionaban al Jamming en su página web o redes sociales como parte de su itinerario. También hubo inconsistencias entre los artistas anunciados en la web del festival y el cartel que circulaba en redes sociales. Aunque, de entrada, parecía un error de diseño.

“Si bien nunca pensé que el evento no se fuera a realizar, sí me imaginé que iba a estar muy desorganizado, porque ya varias bandas habían cancelado y había rumores de que no iba a haber una buena organización. Para ese momento me salió un viaje y por eso decidí venderlas”, nos cuenta alguien más que también compró entradas.

“Unos días antes del evento publicaron lo que iba a ser el horario de presentación de cada artista. De los que se anunciaron faltaban varios. Desde ahí empecé a pensar que eso no iba a resultar bien, incluso yo mismo pregunté por redes, desde ese momento, como se hacía para la devolución del dinero, pues artistas por los que yo pagué desde el 2019 no iban a estar”, nos cuenta otro de los asistentes.

638890_Foto: Katherine Fresneda

Foto: Katherine Fresneda

En entrevista con Shock, publicada el 27 de enero de 2022 , Alejandro Casallas, director del Jamming, afirmó: “El festival en su edición 2022 cumplirá sus 10 años de existencia. Tenemos una trayectoria que nos respalda. Todos los artistas anunciados en el cartel están contratados y confirmados”.

Nos mintió.

La suspicacia creció pocos días antes del evento, cuando artistas como Los Cafres y Black Eyed Peas anunciaron que no se presentarían. El hecho de que los horarios de cada escenario tampoco se publicaran a tiempo también generó sospechas. Muchos notaron que se bloqueó la opción de hacer comentarios en algunas publicaciones de redes sociales, algo que evocó al tristemente célebre Fyre Festival de 2017.

  • Vayan acá para saber más | El fraude de Fyre, el festival más exclusivo que nunca sucedió

También empezaron a circular rumores de que el equipo logístico no estaba recibiendo el pago correspondiente, algo que efectivamente pudimos constatar en entrevista con uno de sus miembros . “A nosotros nos pagaban muy puntualmente, pero un día la plata no llegó y la gente se rebotó, yo creo que había mil de personas y por ahí unas 600 no volvieron, porque no les pagaron. Los organizadores entraron en pánico, nos decían ‘por favor ayúdennos a conseguir más personas’, como en una pirámide. Diariamente nos pagaban 80.000 pesos, yo llegaba a las 6 de la mañana y me iba a las 6 de la tarde».

«Después solucionaron y la gente volvió. Ahí empecé a sospechar que tenían problemas de dinero, porque cómo un festival así no le iba a pagar a la gente. A mí me deben un día, pero sé que hay personas que les deben 3 o 4 y hasta una semana completa”, nos dijo un logístico del Jamming en una entrevista publicada el 18 de marzo de 2022.

“Un familiar que trabajaba en la logística del evento me envió un audio por WhatsApp diciendo que todo el evento se había caído. Estaba como agitado, pues nos decía que los jefes les ordenaron levantar todo lo más rápido posible y salir de allá”, nos cuenta alguien más que aún espera la devolución de su entrada.

10 años de reggae

«Leí muchos comentarios al respecto pero yo ya había asistido antes al Jamming y ya había visto artistas que estaban en este cartel, como Damian Marley, Movimiento Original, Orishas, etc; entonces no desconfiaba tanto del cartel porque mi experiencia previa había sido positiva».

Muchos confiaron en que ocurriría, pues el Jamming venía realizándose exitosamente durante varios años. O por lo menos en cuanto al público. Su primera edición fue en 2012, y en ella estuvieron artistas como Sizzla Kalonji y Barrington Levy, desde Jamaica; Los Cafres de Argentina y Gondwana de Chile; los colombianos Alerta Kamarada, Systema Solar, Ras Jahonnan & Natural Selection, entre muchos otros.

En pocos años, el evento se convirtió en un referente para el público seguidor del reggae y el ska de Colombia. Por sus tarimas también pasaron Cypress Hill, Method Man, Redman, Fabulosos Cadillacs, Residente y muchos más.

Alejandro Casallas también era propietario del bar Casa Babylon, pilar de la escena en Bogotá, el mismo que muchos intentaron vandalizar luego de que se supo de la cancelación del evento.

“Yo soy principalmente un aficionado de la música. Me encanta el entretenimiento y ver a la gente sonreír. Desde los 13 años me involucré en estos ritmos alternativos, fue parte del movimiento del ska y el reggae con bandas como 1280 almas o Alerta Kamarada”, decía Casallas en una entrevista en 2020.

“El mismo crecimiento del bar nos motivó a hacer eventos más grandes”, dice el promotor y por eso en 2011 su empresa contribuyó a traer a Damian Marley, uno de los más grandes en su género. Eso los llevó a pensar en consolidar un evento dedicado a la cultura reggae, al mejor estilo de festivales internacionales como One Love Festival o el Summer Jam.

Tras varias ediciones en el norte de Bogotá, el festival se trasladó a un clima más cálido: Ricaurte, Cundinamarca. Para la fallida edición de 2022 su ubicación cambió a Playa Hawai, a las afueras de Ibagué. Miles de personas ya habían estado en ediciones exitosas del festival viendo a sus artistas favoritos del género.

Visto en retrospectiva, el cambio de locación no fue pensado por la experiencia del público, sino por las restricciones y los trámites que obliga hacer un evento en Bogotá.

Por eso, pocos sospecharon cuando las entradas se pagaban por transferencia bancaria, Efecty o Nequi, y no había un servicio como Tu Boleta, Entradas amarillas, E-ticket o alguna empresa similar. Las tiqueteras permiten llevar un registro de cada transacción en caso de que el evento sea cancelado, como efectivamente sucedió. También muchos notaron que, a diferencia de otros grandes festivales, no figuraba ninguna marca patrocinadora en la comunicación del evento.

“Hoy, creo que nos faltó convencernos de todas las red flags que salían en redes sociales. Analizando con detenimiento, ¿cómo iban a poder traer tantos artistas sin tener un patrocinador? O sencillamente, ¿cómo pudimos creer en una organización que imprimía boletas en una discoteca sin tener respaldo de alguna entidad financiera o una sociedad como tuboleta?”, nos cuenta otro asistente.

¿Y ahora qué?

La empresa organizadora del Jamming ya estaba en bancarrota cuando prometió el festival, según reveló una investigación de Vorágine . Por cada $100 que tenía la empresa Buena Vibra Eventos EU, $96 estaban endeudados. De acuerdo con los estados financieros, la empresa tenía activos por $1.124 millones y deudas que llegaban a los $1.035 millones.

La Superintendencia de Industria y Comercio determinó que “las condiciones inicialmente informadas sobre el evento, los artistas y el orden de las presentaciones de los mismos, habían variado, sin que presuntamente se hubiesen informado a los consumidores de manera clara, veraz, suficiente, oportuna, verificable, comprensible, precisa e idónea”, de acuerdo con un comunicado.

Por eso la entidad exigió a la empresa informar con claridad a los asistentes los artistas confirmados y las posibles soluciones para la devolución de dinero. Todas las personas consultadas por Shock, dijeron que habían enviado un correo y sus datos a un formulario en Google Docs. Hasta el momento, ninguno ha recibido respuesta. Los emprendedores también nos dijeron que no han vuelto a saber nada del festival y dan por hecho que su dinero se perdió.

En un correo electrónico de junio de 2022, reproducido por Semana, Buena Vibra Eventos se acogió a lo consagrado por el artículo 5 del Decreto Legislativo 818 de 2020, que indica que la devolución del dinero de eventos cancelados puede hacerse hasta un año después de la emergencia sanitaria, es decir, el 30 de junio de 2023.

638968_Molotov en el Jamming Festival - Foto. Katherin Fresneda

Molotov en el Jamming Festival – Foto. Katherin Fresneda


“De manera que durante la vigencia de la Emergencia Sanitaria que en la actualidad sigue declarada hasta el 30 de junio de 2022 y hasta un año más realizaremos todas las gestiones para buscar dar reembolso a las personas que eligieron dicha opción dentro de los plazos otorgados por la normatividad citada, así mismo, buscaremos trabajar en las alternativas de solución para el público, los proveedores, restaurantes, patrocinadores y, en general, todos los afectados, lo cual demanda diligencia, sacrificio, pero sobre todo tiempo; en especial, porque la mayor parte de los recursos del festival se destinaron para honrar los compromisos adquiridos con los artistas y en la producción del evento al 95 % de lo planeado (montaje de los escenarios, carpas, camerinos, pantallas, sonido, stands, restaurantes)”, dice el correo.

Al Jamming les quedan todavía 3 meses para devolver el dinero, pero muchos dudan que llegue a cumplirse. La decepción de miles de asistentes y microempresarios difícilmente será olvidada.

Entretenimiento

El anti-existencialismo y la política detrás de Fruko y sus Tesos

Si hablamos de Fruko y sus Tesos hay que hablar de salsa.La salsa, según el New Grove Dictionary of Music and Musicians, es la combinación de géneros musicales de origen híbrido que van desde el son cubano, la guaracha, el mambo, el chachachá, los sonidos antillanos hasta pasar por el bossanova, el reggae, el jazz…

Publicado

en

El anti-existencialismo y la política detrás de Fruko y sus Tesos

Si hablamos de Fruko y sus Tesos hay que hablar de salsa.

La salsa, según el New Grove Dictionary of Music and Musicians, es la combinación de géneros musicales de origen híbrido que van desde el son cubano, la guaracha, el mambo, el chachachá, los sonidos antillanos hasta pasar por el bossanova, el reggae, el jazz y el rock and roll.

El diccionario de la RAE, por otro lado, se refiere a la “salsa” como: 1) “una composición o una mezcla de varias sustancias comestibles que se hace para aderezar o condimentar la comida”; y 2) “esa cosa que anima o alegra”.

¡Sí!

La salsa no solo abarca una variedad de sonidos y ritmos, sino que expresa un atractivo contagioso: el fervor y la manifestación gozosa que invita a las personas a bailar para sacarse los problemas y recuperar algo de alegría.

La salsa, por lo tanto, y como bien recuerda Andrés Caicedo en ¡Que viva la música!, no se trata de “sufrir me tocó a mí en esta vida”, sino de “agúzate que te están velando”.

Esta forma radical de expresión, en la que el sufrimiento, el descontento, el dolor y el desamor se bailan, la encarna perfectamente una de las agrupaciones más emblemáticas del sonido salsero de Colombia, Fruko y sus Tesos.

La historia de Fruko y sus Tesos

Fruko y sus Tesos fue el humilde peón que emergió de los barrios bajos, la “negramenta” y el populacho (Julio Estrada, conocido como Fruko, por ejemplo, era el “todero” de Discos Fuentes de Medellín en los 60; el Joe Arroyo venía del barrio Nariño, uno de los lugares más marginales de Cartagena; y Wilson Manyoma, Saoko, provenía del barrio popular de la Alameda en Cali).

Pero la agrupación de repente pasó del inframundo al firmamento por la sola virtud de una estética destructora del “bien” y un sonido cósmico; un sonido bravo, picante y energizante que despertó del letargo a diferentes generaciones de jóvenes pobres, bohemios y desclasados en las décadas del 70 y 80.

El sabor y el tumbao del sonido de Fruko fue, al mismo tiempo, la cumbre de la indulgencia, el hedonismo y la resistencia que le permitió a esos espíritus jóvenes desesperados escapar del laberinto de la monotonía cultural y el existencialismo que les ofrecía la música en ese momento.

Hablando de la vida de barrio en los años 50 de su Medellín natal, Julio Ernesto Estrada, Fruko, dice que los tangos eran “canciones de maleantes y camorristas”, y que la música mexicana que se escuchaba en la época como los corridos “también tenían ese mensaje, música de despecho, música para pelear, música triste”.

El escozor que le producía el tango y la carrilera al joven Fruko era producto de la asociación directa de estos dos géneros con emociones que generalmente llevaban al desprecio y al “pesar”.

Y, en ocasiones, despertaban cierto sentimiento de rabia y desesperación por los golpes del destino, especialmente por el amor no correspondido, la muerte, la pobreza y la tragedia.

Pero Fruko y sus Tesos no estaba dispuesto a reproducir en su música la insulsa introspección y la aparente preocupación por un país que está más acostumbrado a acumular tragedias, a reciclar violencias y a apilar muertes.

Por el contrario, el sonido de Fruko era la contraparte y la respuesta al existencialismo hipócrita de otros géneros musicales que tenían como sustento creativo una sociedad que ha vivido “pensando” y “reflexionando” acerca de la “libertad”, la “igualdad”, la “reconciliación”, la “responsabilidad”, el trabajo, la “condición humana”, las mujeres y la sexualidad.

Nada de boleros, nada de tangos.

La banda surgió después del periodo de la Violencia y durante el Frente Nacional, una etapa de reconciliación política y paz doméstica que le permitió a liberales y conservadores repartirse el poder cada cuatro años.

Mientras se ponía en práctica una singular forma de democracia constitucional en Colombia y se implantaban programas sociales y económicos diseñados para rehabilitar zonas del país golpeadas por la Violencia, los músicos de Fruko y sus Tesos producían un mar de fondo de actividad creativa que se proponía reclamar y celebrar este nuevo momento histórico.

Por lo tanto, si el ritmo de la economía “crecía” gracias a las exportaciones de café y la manufactura de bienes de consumo durables, también crecía la caja de ritmos de la agrupación con el lanzamiento de su primer álbum en 1970, Tesura.

Tesura

El disco es un embate de timbales, ráfagas de trompetas, aluviones de bajo y torbellinos de piano, acompañados de la gran voz de Humberto Muriel y, que, puestos en un mismo plano permitían ir a la búsqueda de nuevas formas de éxtasis capaces de maravillar y enlazar los sentidos.

Portada del álbum Tesura de Fruko y sus tesos

Portada del álbum Tesura de Fruko y sus tesos

// Discos Fuentes

Esta primera visión de la banda ya exponía su extremo más furioso, el lado vistoso y reconfortante de un mundo que comenzaba a despertarse gracias a las descargas de energía producidas por cada nota.

Los jóvenes reunidos en las esquinas, en los parques, en las verbenas al aire libre de ciudades como Medellín, Barranquilla, Bogotá y Cali encontrarían su propio nirvana y nuevas formas de placer en los compases de la música de Fruko y sus Tesos.

La entrega a la exaltación de los condenados —mientras se bailaba al ritmo de un nuevo estilo de música sincrética que se estaba confeccionando— se dio con el lanzamiento del segundo LP, A la memoria del muerto de 1972.

A la memoria del muerto

Despojando a la música hasta su desnudez más esencial de mera actitud, ritmo y tumbao, el disco presenta un mensaje claro: ¡No más lamentos!

En la canción que da nombre al álbum, A la memoria del muerto, Edulfamid Molina Díaz, más conocido como Piper Pimienta canta:

Yo no quiero que me hablen / De pena ni sentimiento / Yo quiero vivir mi vida / Alegre, feliz, contento / El día que yo me muera / No quiero llanto ni rezo / Pregúntenle a Jaime Ayala / Que es ahora, el vivo muerto.

Como si se tratará de una especie de oda a los años de guerra y violencia bipartidista, la muerte recobraba no el tradicional sentido de dolor y tristeza, sino de alegría, seducción y comedia.

La salsa brava, la salsa picante que emanaba de la banda no hizo más que derretir las jerarquías que la tradición musical colombiana había impuesto, pero, sobre todo, produjo un tipo de cinismo crítico que se burlaba de la figura épica del héroe positivo cuyo único objetivo era la búsqueda obstinada de una vida libre mediante el trabajo duro y el sufrimiento.

Fruko el bueno

La materialización de esta idea se dio en el quinto LP de la agrupación, Fruko el Bueno, “Ayunando” de 1973.

En este álbum la banda ya contaba con la participación vocal del enorme Joe Arroyo —quién previamente había grabado los discos Fruko “El Bueno” (1972) y La Fruta Bomba (1972)— y el magnífico Wilson Manyoma, dos de las voces más polirrítmicas del país y capaces de desatar un nuevo ciclón de adrenalina mutante.

¿Por qué es que te resientes si apenas he llegado? / Sabes que estaba ausente y mi amor no ha cambiado / He vuelto lleno de cariño / Y con ansias de amarte y quererte más / ¡Epa! / Si lloras por capricho o por melancolía / Olvida ya la pena y vive el presente / He vuelto lleno de cariño / Y con ansias de amarte y quererte más

Así canta el Joe en la canción El Ausente, para recordarle a Adela que su tristeza y desesperación no es más que el producto de su quietismo contemplativo del pasado.

Este álbum comenzaría a consolidar el sonido de Fruko y sus Tesos, estableciendo una serie de elementos sonoros y rítmicos que, posteriormente, serían una marca registrada y característica de la agrupación.

Por ejemplo, el coro de percusión menor y la fuerza de gravedad del sonido repetitivo de la batería le permitieron a la banda evolucionar en un plano vertical donde la energía asciende y desciende de forma continua y abrupta.

Los estratos percusivos y los propulsores polirrítmicos se combinaron con el lado sórdido y viscoso de la alegría luminosa que proyectaban las letras de muchas de las canciones que la banda interpretaba —aunque, al menos, en sus primeros álbumes no fueran creación propias, sino prestamos de otras bandas.

La resistencia política de Fruko

Más que ganar amigos e influenciar gente, la música de Fruko y sus Tesos fue particularmente emblemática de un nuevo tipo de resistencia política centrada en las expresiones individuales del deseo.

Su foco en la “positividad” de la vida y la alegría no consistía en una simple negación de la situación de precariedad de las personas en el país, sino que iban encaminadas a promover la emancipación de las fuerzas sociales, económicas y políticas que atan e inmovilizan a las personas.

La música de la banda tenía como intención liberar el deseo para que las personas a través de la música se conviertan en “máquinas deseantes”, relacionándose y conectándose en la pista de baile con las otras “máquinas” sin complejos, ni represiones, ni restricciones.

En el disco Fruko el bueno la banda produjo una serie de canciones que invitaban tanto a subir más el volumen como a poner “alguito” más pesado para vivir un momento realmente erótico.

Canciones como Rumbero soy, Cantando mi son me muero, Tania, Vamos a gozá y Rumbita Loca liberaban a las personas de la frustración de sus situaciones económicas, sociales y personales para catapultarlos al Olimpo de la gloria y el júbilo que solo el baile permite.

Fruko y sus Tesos fue para muchos como “vivir un verano mágico”. Sus texturas musicales no fueron solo producto de la ilusión del supuesto “buen momento” que vivió el país en la década de los 70, ni tampoco la negación de la desigualdad y la precariedad que desde hace mucho tiempo hacen parte esencial de un país como Colombia.

Por el contrario, la música de Fruko y sus Tesos se constituyó en un conjunto de visiones sónicas sobre cómo asomar la cabeza para escapar de la violencia, la miseria y la desigualdad tan solo por un momento.

La “magia” se hacía realidad cuando sonaba esa maravilla de sabor, esa maravilla de tumbao.

Las personas solo necesitaban abrir sus sentidos y respirar el aire que el sonido de Fruko y sus Tesos generaba para terminar envueltos en sus perfumes y contemplar la dicha y el placer que producía la travesía por el paraíso perverso de la pista de baile.

***

Recomendamos leer:

  • Discos Fuentes: así es su proceso para rescatar joyas inéditas de la música
  • Una charla con Fruko y Mariano Sepúlveda, los arquitectos de Afrosound

Además, aquí abajo el maestro Fruko habla de música y salud mental para Shock

Sigue leyendo

Entretenimiento

Dragon Ball: los aprendizajes que nos dejó la obra cumbre de Akira Toriyama

El recién fallecido Akira Toriyama fue esencial para la educación emocional de varias generaciones que hoy son adultas. Particularmente por su obra más conocida, Dragon Ball. Este tributo piensa y agradece algunos de esos aportes, como levantando las manos para devolver ki y aportar a un último Genkidama.Por Juan Diego Barrera // @balandro1999Dragon Ball, la…

Publicado

en

Dragon Ball: los aprendizajes que nos dejó la obra cumbre de Akira Toriyama

El recién fallecido Akira Toriyama fue esencial para la educación emocional de varias generaciones que hoy son adultas. Particularmente por su obra más conocida, Dragon Ball. Este tributo piensa y agradece algunos de esos aportes, como levantando las manos para devolver ki y aportar a un último Genkidama.

Por Juan Diego Barrera // @balandro1999

Dragon Ball, la serie de manga y anime ilustrada por Akira Toriyama, es, sin lugar a dudas, la obra más influyente y popular de la animación japonesa. Lo soportan los números comerciales —a los que solo se acerca One Piece— y la avalancha de tributos que vemos hoy, tras la noticia del fallecimiento de su creador.

Inspirado por una de las primeras olas del manga como lo conocemos, y por su fascinación por la animación de Disney, Toriyama consolidó una obra que marcó un antes y un después en el diseño de personajes, en el desarrollo de argumentos y villanos en los programas para jóvenes y, por supuesto, en la representación de las peleas uno a uno.

Sobre todo, marcó algunos de los primeros y más profundos encuentros de generaciones enteras con misterios de la vida y con desafíos de la experiencia humana contemporánea: la muerte, lo que está más allá de lo humano, la inteligencia artificial, la sacrificialidad y hasta el genocidio.

A continuación les presentamos nuestras esferas del dragón: las ideas con las que Dragon Ball, y por ende Toriyama, nos ayudaron a crecer, haciendo que el cielo resplandeciera a nuestro alrededor:

1. La relación entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos nunca es de aislamiento total

Los vivos buscan activamente cómo invocar a sus aliados y a sus seres queridos que no están presentes cuando más necesitan de su poder y compañía. Es apenas lógico, y ellos confían en que la muerte no es lo mismo que el silencio.

Por su lado, los muertos siempre nos están mirando desde otro lugar. Allí, Toriyama los imagina negociando con lo suprahumano para que permita que ellos puedan interferir y ayudarnos. En ese otro mundo, cuando no están velando por nosotros, existen dedicándose a lo que más aman, incluso si se trata de entrenar.

De hecho, en ocasiones, los muertos se dan maña para venir a visitarnos de distintas maneras. Una de las escenas más memorables de Dragon Ball es el reencuentro de Goku niño con su fallecido abuelito Gohan.

Su encuentro le permite al abuelo pedir perdón a su nieto por el daño causado al cortar su particular cola de mono. También es el momento para expresarle cuán orgulloso está de su crecimiento. Ese tipo de fantasías nos permitieron a muchos entender el duelo no solo como pérdida, sino como cambio de la relación con nuestros seres queridos, que siguen interviniendo en nuestro proceso personal y dándonos fuerza y amor.

2. Años y muchos capítulos después, cuando Goku ya era mayor, nuestro héroe entiende que fue él mismo quien asesinó a su abuelo sin saberlo. Con la llegada de los Sayayín a la tierra, Goku conoce a su hermano Raditz, quien le revela el origen alienígena de ambos. Más adelante, el protagonista se enfrenta a Vegeta, príncipe de los Sayayín, quien en medio de la batalla se convierte en un simio gigante haciendo uso del poder que su genética tiene en interacción con la luna llena.

Al ver la transformación, y por ende verse reflejado, Goku entiende que el ataque de un mono gigante que acabó con la vida de su abuelo fue propiciado por él mismo cuando era un niño. Solo al ver los comportamientos en los que él mismo puede caer, dejó de creer lo que pensó durante años: que estuvo inconsciente durante la catástrofe.

Comprender la naturaleza propia, compartida con su hijo y con ese nuevo rival —que se convertirá en su gran aliado—, permite a Goku entender que de su gran poder viene gran responsabilidad, y que es necesario cuidar a los demás de sí mismo.

3. Más adelante, aparece Freezer, el villano más popular de la saga. El alienígena, según le alertaron a Goku los sayayines que ya ha conocido, fue el perpetrador del genocidio de su especie, pues destruyó su planeta de origen por completo. ¿La razón? Una profecía que le alertó de un guerrero que vendría de allí y sería capaz de derrotarlo.

A lo largo de esta saga, Goku y sus amigos ven con temor y consecuencias mortales cómo Freezer aumenta su poder cada vez más, mientras se transforma en versiones de sí cada vez más espantosas. Al final, la vida misma en la tierra depende exclusivamente de nuestro héroe, que tras decenas de capítulos dedicados a la pelea logra alcanzar el nivel Súper Sayayin y derrotar al villano.

Es decir, cumple la profecía, y demuestra que el miedo a la diferencia, esa cobardía extrema que tanta sangre derrama en el mundo real, está condenada a fallar. No importa en cuantas transformaciones tenga, la cobardía es siempre la misma.

4. Pero en la película no-canónica “Dragon Ball Z: ¡Arde! Una superbatalla feroz, extrema y ardiente” aparece Broly —y, seamos honestos: para la infancia latinoamericana, esa diferenciación entre lo canónico o no carecía de sentido.

Broly es otro sayayín sobreviviente, candidato a ser el legendario guerrero. Es un personaje muy conocido por dos razones: los memes y su aparición en los aclamadísimos videojuegos de la serie en los que aparecía —como la saga Budokai Tenkaichi. En estos últimos, como en la serie, Broly estaba hecho para ser muchísimo más difícil de derrotar que otros guerreros Sayayín, pues era mucho más grande y resistente.

La razón es bastante trágica: su padre lo entrenó desde muy pequeño, y lo explotó psicológicamente hasta que hacer de él “el elegido” se convirtió en el sentido de la vida de ambos.

En las diferentes oportunidades en las que los guerreros Z se encuentran con Broly y con gran dificultad lo derrotan, nos enseñaron que nada está predestinado, y que prepararnos exclusivamente para un solo camino en la vida es quitarnos a nosotros mismos la vida en su esplendor, así como nuestro propio potencial.

5. Los androides de Dragon Ball y su historia están evidentemente inspirados por el auge de la saga Terminator. Su versión más terrorífica, Cell, es el eje central de uno de los arcos narrativos más recordados. Ese villano adquiría su poder de literalmente consumir los cuerpos de otros guerreros, absorbiendo sus habilidades y fuerza.

Es una metáfora efectiva que permite entender la inteligencia artificial actual: su poder no reside en sí misma, sino en la sumatoria de producciones humanas que referencia. Evitar que sea o no un problema depende de cuanta resignación tengamos ante la idea de que es un monstruo que supera a nuestra especie.

6. Uno de los puntos más divisivos entre manga y anime de Dragon Ball es el hecho de que Akira Toriyama nunca quiso que Goku fuera comprendido como un héroe justiciero que luchaba por los demás.

En unaentrevista para Wired en 1997, insistió en que, en la adultez de Goku, quiso dejar ver que muchos de los problemas que enfrentan el mundo y los guerreros Z se deben al egoísmo de Goku, y a su insistencia en luchar contra tipos cada vez más fuertes. En ocasiones, —la saga de Cell es el mayor ejemplo–, tomaba decisiones absurdas como dejar la tarea de vencer al villano a su pequeño hijo, generando tal presión que este tuviera que sacar fuerzas del trauma que estaba viviendo en tiempo real para sobrevivir.

Uno de los aprendizajes complejos pero necesarios para hacerse adulto es la realización de que nuestras acciones no necesariamente derivan en lo que queremos en el mundo. Es que además eso aparece en la historia: el mencionado hijo de Goku, Gohan, vence a Cell en una de las peleas más memorables de la saga. Entra así a la discusión sobre el personaje más poderoso de Dragon Ball Z, dada esa pelea.

En la siguiente temporada, lo vemos mayor, convertido en el “Gran Saiyaman” un alterego de héroe frustrado que lucha contra el crimen en la ciudad. Y si bien es importante para derrotar a Majin Buu, buena parte del último tramo de la saga Gohan nos muestra que, como en el vallenato, los caminos de la vida no son los que yo creía

7. La tensión entre la intención del artista y la obra que más masivamente conocimos muestra que es el capitalismo, la industria y los tropos establecidos a lo largo de la historia —como el del viaje del héroe— los que nos envían en una senda donde la sacrificialidad y el sufrimiento son lo más valorado. Si bien Goku sembró en muchos la semilla del automejoramiento, ver ese cuestionamiento de Toriyama a Dragon Ball es una oportunidad para deconstruir lo aprendido y pensar antes en el bienestar propio y de los demás.

Hasta siempre, Akira Toriyama. Quienes crecimos en su legado protegeremos el planeta y a nuestros seres queridos con el tesón y determinación que nos enseñaste.

A ustedes, ¿qué les enseñó Dragon Ball?

A ustedes, ¿qué les enseñó Dragon Ball?

Sigue leyendo

Entretenimiento

SZA, la ira y la venganza en el lenguaje del amor

El público de la música pop siempre ha exigido héroes e íconos. Quizá más que en cualquier otro género. Sin embargo, Solána Imani Rowe, conocida como SZA, es de un tipo diferente de estrella e ícono pop.Su música se trata de algo mucho más intenso que las simples y fácilmente digeribles canciones de ruptura al…

Publicado

en

SZA, la ira y la venganza en el lenguaje del amor

El público de la música pop siempre ha exigido héroes e íconos. Quizá más que en cualquier otro género. Sin embargo, Solána Imani Rowe, conocida como SZA, es de un tipo diferente de estrella e ícono pop.

Su música se trata de algo mucho más intenso que las simples y fácilmente digeribles canciones de ruptura al estilo Miley Cyrus o Taylor Swift.

Su sonido rescata el fatalismo, el exceso, la rabia y el odio del hip-hop de los 80 y 90, así como recupera la idea del amor hacia sí mismo del movimiento “Black is Beautiful” de los 60 en una versión que expresa la importancia de la apreciación tanto de la cultura como de la propia identidad.

La historia de SZA

Solána Imani Rowe creció en un hogar musulmán ortodoxo de clase media-alta en los suburbios de New Jersey.

Su infancia no solo fue diversa por este tipo de conformaciones sociales y culturales —podía seguir a líderes religiosos como Elijah Muhammad, pensar al estilo de Malcolm X, soñar con Martin Luther King Jr. e impacientarse por ver mayor estabilidad en la economía—, sino que además fue compleja.

A Solána le resultaba difícil encajar y seguir los flujos sociales que el sistema diseña para que las personas (y las mujeres en particular) circulen con una sonrisa mientras la precariedad se expande en todo el planeta.

SZA en 2021 en los Billboard Music Awards - Show

En esta imagen SZA canta en vivo en el escenario de los Billboard Music Awards el 23 de mayo de en el Microsoft Theater de Los Angeles, California.

// Foto por Kevin Mazur/Getty Images for dcp

En la época de colegio, por ejemplo, fue acosada después del 11 de septiembre por llevar su hiyab.

Eso le mostró, por primera vez, que las diferencias culturales y raciales son consideradas una amenaza y un delito en la Norteamérica democrática.

Situaciones como esta le permitieron crear sus propias ideas sobre cómo (sobre)vivir en un país como Estados Unidos.

¿Por qué se hace llamar SZA? 

Un primer acto de afirmación de su identidad como mujer negra y musulmana fue la construcción de su nombre artístico, SZA, el cual tomó del Alfabeto Supremo de la Nación del Islam: “Sovereign Zig-Zag Allah” o “Savior Zig-Zag Allah”.

Lo que siguió a este proceso de identificación con el mundo musulmán fue la autoedición y el lanzamiento de los EP SEE·SZA·RUN (2012); S (2013); y Z (2014), material que llamó la atención de la prensa especializada y de un grupo de nuevos seguidores, y que le permitió unirse a la compañía discográfica independiente Top Dawg Entertainment (TDE), sello que contaba dentro de sus filas con artistas como Kendrick Lamar y Jay Rock.

Ctrl

Su álbum debut, Ctrl, lanzado en junio del 2017, la situó a la vanguardia del R&B contemporáneo.

El disco combina la expresividad del soul clásico con una atmósfera cargada de sintetizadores sombríos, una voz ronca pero dulce, ráfagas radiantes de percusión y energizantes dosis de guitarra que se acompañan con poderosas líneas de bajo.

Portada del álbum Ctrl (2017) de SZA

Portada del álbum Ctrl (2017) de SZA

// RCA Records

Ctrl refleja dos cosas.

Primero, la idea de que el control es una ilusión, pero como sugiere el eco de la voz de la madre de SZA al principio de Supermodel (“Ese es mi mayor miedo / Si perdiera el control / O no tuviera el control / Las cosas simplemente, ya sabes / Yo sería fatal”) y al final de la canción Something (“Y si es una ilusión no quiero despertar / voy a aferrarme a ello / Porque la alternativa es un abismo, es sólo un agujero, una oscuridad, una nada / ¿Quién quiere eso?”), existe cierto poder y tranquilidad al aferrarse a la ilusión, incluso, cuando la reconocemos como tal.

Lo que sale a relucir en este álbum es la contradicción que existe entre ser la “dueña” de la narrativa de la propia vida (“eres libre”, “todo lo que quieras lo puedes lograr”) y la recuperación del control de la vida cuando se está dispuesta a renunciar a esas tristes y banales ideas de que somos dueños de nuestro propio destino (solo hay ciertas cosas que controlamos).

El mensaje es claro: debemos jugar con lo que existe para poder interpretar el papel que nos permite competir en el show de talentos.

Pero, por supuesto, esto no implica que se piense que las cosas están bien tal como están, sino que la oportunidad de transformar las cosas solo existe dentro de lo que brinda el sistema.

El segundo punto que expone SZA en el disco es el viaje que realiza hacia la búsqueda del amor propio y la aceptación. 

En la canción Supermodel, por ejemplo, muestra por medio de una carta la ira que siente hacia su novio luego de enterarse que ha sido engañada, para, posteriormente, confesarle su propia traición y, finalmente, exponer su estado de vulnerabilidad y dependencia en la relación.

Estoy escribiendo esta carta para hacerte saber / Que realmente me voy / Y no, no me quedaré con tu mierda / Déjame decirte un secreto / Me he estado tirando a escondidas a tu amigo / Déjame solo por mujeres más bonitas / Sabes que necesito demasiada atención / Por mierdas como esas / Sabes que estás equivocado / Podría ser tu supermodelo / ¿Por qué no puedo quedarme sola? / Ojalá estuviera cómoda conmigo misma / Pero te necesito.

SOS

Este vínculo entre el (des)amor, el sexo, la autoprotección, las fantasías de venganza, la lucha contra la inseguridad, la aceptación y el empoderamiento de la belleza negra tienen un aspecto curiosamente existencial que se hace más visible en su segundo álbum, SOS.

El disco sostiene un sonido emocionalmente intenso y escabroso, una combinación rítmica que va desde el trap-soul, el lo-fi hasta pasar por el Neo-soul, el grunge y el punk.

En la conmovedora y descarnada canción que tiene por nombre el mismo título del álbum, SOS, SZA se propone abandonar una relación conflictiva y dejar atrás los enredos de un supuesto amor seguro; pero primero debe dejar claro lo que piensa y reclamar por todo lo que dio en una transacción amorosa de la cual recibió muy poco.

Y así es, necesito comisiones por lo que es mío / Toda esa salsa que recibiste de mí / Toda esa mierda que di gratis / Y lo quiero de vuelta, lo quiero de vuelta / Esto no es un disparo de advertencia / No más mierda, ya terminé / Y todas las tonterías a un lado / Toda la mierda falsa a un lado / Solo quiero lo que es mío.

El álbum, en general, esboza los flujos de las emociones, los contrastes que existen en esos momentos de fuerza, determinación, ánimo y que, prontamente, se transforman en tristeza, soledad e inseguridad.

Kill Bill, por ejemplo, la tarjeta de presentación del disco, es una balada en la que la artista fantasea con el asesinato de su exnovio para que ninguna otra mujer pueda tenerlo y, aunque, reconoce que es un sueño siniestro no puede dejar de imaginarlo.

No obstante, la fantasía de venganza de Kill Bill no proporciona una recompensa emocional real; su narrativa es un grito de puro de dolor y fatalismo que representa la otra cara de la imagen de la mujer que “no siente el engaño”, la que se “recompone rápidamente”, la que se “alegra” con su grupo de amigas simplemente yendo de compras y comiendo enormes cantidades de helado o la que compensa la situación con otro tipo de placeres apósitos.

En canciones como Smoking on My Ex Pack, Far, Conceited” y Forgiveless, al igual que en todo el álbum, SZA se enfrenta tanto a sí misma como a sus parejas, evidenciando el cansancio y el desgaste que le producen las relaciones.

En ocasiones los sonidos reflejan momentos de paz que se encuentran incrustados en un mundo caótico y vislumbran la inercia en el aparente cambio en la vida de las personas.

Sin embargo, no todas las canciones del disco tratan de seguir adelante y dejar atrás sus relaciones pasadas; SZA sigue teniendo la tendencia a tomar decisiones “equivocadas” que pueden no acabar bien para ella (Too Late y F2F) y se cuestiona su valía en algunos casos (Special).

La honestidad que evoca el proyecto musical de SZA y la fe depositada en exponer su vulnerabilidad y sus inseguridades como terapia permiten iluminar los rincones más siniestros del yo.

Es ahí, en su interior, el lugar oscuro de la ira, donde su auténtico espíritu oculto crece y se alza de forma sólida y hermosa para hacerle frente a sus pesadillas, debilidades e impotencias

Pero no para salir a la conquista del “hombre elegido” o para culminar en una especie de trascendencia de todo su destino romántico, sino, justamente, para exponer que no es una mujer unidimensional; una mujer “bendecida” por la seguridad del modelo de empoderamiento que niega la rabia y el sufrimiento femenino y lo sustituye por el júbilo, el entusiasmo y el optimismo emancipador.

La música de Solána Imani Rowede no aspira a conquistar al mercado feminista joven (y negro) con emocionantes intentos de construcción de confianza al mejor estilo de los libros de autoayuda. Su propuesta pretende aprender a convivir con esa intimidad siniestra y el escrutinio de sí misma para fortalecer su existencia, los miedos que rigen su vida y, primordialmente, hacerle frente a los silencios que dominan los cuerpos de las mujeres negras.

***

SZA comparte tarima de Festival Estéreo Picnic con artistas como Phoenix o Hozier. A propósito, les recomendamos leer:

  • Phoenix: ¿qué nos dice la banda sobre el amor, la libertad y la nostalgia?
  • Hozier y las cosas hermosas que nos dejan ver el cielo

Sigue leyendo

Tendencias

  • https://radios.pycserver.com/proxy/pyc/stream
  • Ritmo Digital